En esta novela corta, Enrique de la Cruz nos traslada a una pequeña ciudad fronteriza entre México y Estados Unidos: Los Robles. Estamos en el año 1945. Los Robles se define por «los personajes que la transitan, aquellos que le dan vida». Así, iremos conociendo las vidas de esos personajes que huyen de un pasado o luchan por un presente. El protagonista, Jim Dyson, cuando no se gana la vida «solucionando asuntos turbios de juegos, préstamos, de lo que fuese» pasa la mayor parte del día en el bar Conrad´s, regentando por un exboxeador, Barry Rowland. Precisamente será en el Conrad´s una mujer dará con Dyson y le pedirá que mate a su marido «me la está jugando con otra, merece morir». Dyson «no tenía edad para dejarse embaucar por una falda más corta de lo habitual, pero sí por una buena bolsa de dólares». Sin embargo, no acepta el encargo: el hombre a asesinar es Durán, uno de los mafiosos de Los Robles, donde «ya se considera peligroso pronunciar el nombre de su marido en vano»…. Como lectores de novela negra, no hará falta decir que el protagonista cruzará inevitablemente la línea que sabe que no debe. Lo que ocurra antes y después les sorprenderá seguro.
Enrique de la Cruz coloca sobre el tablero de Los Robles los personajes de la novela clásica canónica: la femme fatale, el policía irlandés, la prostituta, el mafioso, el periodista que conoce todos los entresijos de la ciudad… cada uno cumpliendo su papel sin caer en la caricatura. En ocasiones no falta el humor negro o la fina ironía, por ejemplo, cuando Dyson recurre al periodista del Herald, Garner, piensa en encontrarse con él en el periódico «aunque era más fácil encontrárselo en un contenedor de basura buscando un buen titular». Al mismo tiempo, la ambientación de Los Robles con gentes de ambos lados de la frontera y los diálogos de los personajes nos recuerda a esas novelas clásicas con las que hemos disfrutado tanto. Sin ir más lejos, el nombre de Los Robles está tomado del pueblo homónimo de la película Sed de mal, según el mismo escritor reveló en la entrevista que le hizo Alejandro Moreno en «La inicial escarlata».
Por último, solo nos queda esperar a que Enrique de la Cruz nos anuncie, más pronto que tarde, el siguiente movimiento de Jim Dyson. Mientras tanto, le espero en Los Robles, deseoso de saber qué ocurre con el protagonista y con todos esos secundarios llenos de vida para regalarnos más aventuras y alegrías.