Camilleri publicó El perro de terracota en abril de 1996 y comenzó a trabajar en una novela histórica. Estaba convencido de que, después de dos novelas, no habría más casos para Montalbano. Se había agotado el filón.
Sin embargo, Camilleri no conseguía avanzar con su novela. No avanzaba porque «me venía continuamente una frase a la cabeza y debo decir que sentía una cierta emoción. La frase era «cuenta la del pesquero» y a decirla era Montalbano». Fue tan insistente que Camilleri acabó prometiéndole al «personaje que pasa de la imaginación a la realidad» que le escribiría la historia. Así nació El ladrón de meriendas (Il ladro di merendine)
Como curiosidad. Esta novela fue publicada en diciembre de 1996 y, el 17 de abril de 1997, Camilleri fue invitado al Show de Maurizio Costanzo, un clásico de la televisión italiana. Durante la emisión, el presentador hizo una cosa que no había hecho nunca y nunca repetiría: Mostró el libro y declaró que reembolsaría de su bolsillo al lector que le dijera que no le hubiera gustado. Nadie se lo reclamó y la novela fue todo un éxito.
Dos datos: Hasta 1996, Camilleri con La forma del agua (La forma dell´acqua) y El perro de terracota (Il cane di terracotta) había vendido 5.000 ejemplares. En 1997 vendería 180.000 ejemplares y, dos años más tarde, El ladrón de meriendas sería el título elegido por la RAI para comenzar la serie de televisión. Camilleri siempre le estaría agradecido a Maurizio Costanzo y a… Montalbano.